Para muchos, la temporada de 1993 es una de las más importantes de Ayrton Senna. Sin el mejor coche de la parrilla (aunque McLaren tenía un equipo competente) y con un motor Ford con menores prestaciones al que llevaba Benetton (y peor al motor Renault de Williams), el brasileño disputó alguna de sus mejores carreras.El Gran Premio de Australia, disputado el 7 de noviembre, fue una de esas ...Sigue leyendo
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